jueves, 17 de febrero de 2011

pág.283 "Marina"

"Una noche, era jueves, Marina me besó en los labios y me susurró al oido que me quería y que, pasara lo que pasara, me querría siempre.
Murió al amanecer del día siguiente, en silencio, tal como había predicho Rojas. Al alba, con las primeras luces, Marina me apretó la mano con fuerza, sonrió a su padre y la llama de sus ojos se apagó para siempre."

No hay comentarios:

Publicar un comentario